Si padeces de granitos en las pompas pueden deberse a malos hábitos de higiene o por otras causas pero tranquila, hoy te traemos estos tips que nos vas a agradecer.
Son molestosos, impresentables y muy frecuentes. Quizá en la adolescencia son más notorias pero todos hemos vivido con acné en más de un momento de nuestras vidas.
Los granitos pueden salir en la frente, en la nariz pero, ¿qué pasa cuando aparece en lugares muy incómodos? Alerta de acné en el trasero. ¡Horror!
Tener granitos en esta zona es muy normal, y a veces es cuestión de pocos días para que desaparezca. Hoy te enseñamos cómo eliminarlas y lucir bien en el verano.
- ¿Dedicas una buena limpieza en esa zona o dejas que el resto del jabón en tu espalda lo limpie? Es hora de lavar bien tu trasero, para la esponja por en medio de tus nalgas y sobre ellas.
- No utilices ropa muy ajustada, dejá respirar esa zona de vez en cuando.
- La máquina donde haces ejercicios en el gimnasio está sucia. Jamás confíes de la persona que usó un aparato antes que vos. Llevá tu propia toalla o limpiá el lugar donde te ejercitás. Recordá que con la transpiración se transmiten bacterias.
- Cambiate de ropa una vez que finalizaste tus ejercicios. Este es un hábito de limpieza que va a mejorar tu salud en muchos aspectos.
- Tomá sol cuando sea posible. El sol ayuda a secar el exceso de grasa en la piel de forma natural. Usá un bloqueador solar con un FPS mínima de 30, así protegerás la piel de la radiación UV.
- Aplícate ácido natural directamente sobre los granos. El zumo fresco de limón y el vinagre de manzana diluido en agua pueden utilizarse para tratar los granos. Sin embargo, si tienes alguna lesión abierta en la zona afectada, puede resultar doloroso.
- Dejá que el limón o el vinagre actúe sobre los granos durante 5 a 10 minutos y enjuágate bien con agua fría y un gel de baño suave.
- Utiliza papel higiénico sin fragancias ni tintes. El papel higiénico perfumado o decorado puede causar irritación y favorecer la aparición de granos.
- Sentate menos, párate más a menudo. Al sentarte evitas que la piel respire adecuadamente y estar sentado mucho tiempo contribuye a que se obstruyan los poros debido al sudor y las bacterias.