Consumo por autoestima

  • La propuesta es facilitarte la vida al vestir, y que en la práctica no tengas que lidiar con un guardarropa lleno de ropa pero que nunca encuentres que ponerte.

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    La armonía interior se debe reflejar en la imagen exterior, que impacten para bien a todo el entorno y al mundo entero.

    Cómo comprar menos y mejor

    Antes de salir de casa vale, mapear en el propio guardarropa lo que necesitamos, y luego buscar en las páginas de las tiendas si habrá algún día de la semana específico para descuentos y programar la visita para comprar.

    Especificar todo lo posible nuestra lista de prioridades, como pantalón de vestir negro para la oficina, un jean de color más claro, camisa blanca para combinar con collares y pañuelos más vistosos.

    Si salimos de casa con toda la tarea más arriba mencionada no nos dejaremos llevar por las comprar compulsivas, que luego no facilitarán nuestra vida para disfrutar de lo que realmente importa. También es importante ir vestidas con ropa cómoda, y zapato fácil de poner y quitar para probarnos todo con comodidad.

    Entrenar el ojo y perfeccionar las elecciones

    Siempre hay mayor espacio para otras ideas cuando salimos del mismo contexto de una colección entera de la misma marca, y, cuando voluntariamente nos proponemos por más que no sea lo más fácil del mundo, expandir posibilidades, sobrepasar la zona de confort, y hacer la diferencia.

    Por lo tanto, entrenar la mirada al comprar en aquellas tiendas que no necesariamente sean caras ni de marca, pero sí de calidad, y mientras las probamos podamos armar combinaciones mentales con otras prendas de nuestro guardarropa y que al menos las podremos usar por varios años, ya estaremos encontrando un nuevo sentido.

    ¿Qué buscar?

    Buena conservación

    Fiscalizar los tejidos, es áspero, tiene pelotitas, manchas, hilo suelto, botón a punto de soltarse, debajo de las axilas conserva el mismo color, si es un pantalón cómo se conserva la prenda entre piernas.

    Necesidades mínimas de ajuste

    A veces con pequeñas intervenciones de una modista, ropas de menor valor pueden convertirse en prendas claves de un guardarropa versátil, pero tengamos en cuenta el gasto total si tenemos que intervenir demás.

    Amor eterno

    Debería ser ley poder repetir las prendas al menos con 40 outfits diferentes, y no deberíamos comprar nunca algo que nos quede más o menos, que nos quede solamente bien, y no despierte entusiasmo y ganas de vestir.

    Compremos solamente lo que nos enamora y sigamos creando moda para la vida real.

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