- diciembre 14, 2014
Desconfiar de lo que pone a primera vista en la etiqueta y leer bien la composición de la fórmula son algunas de las claves que desvelan si nos hallamos verdaderamente ante cosmética ecólógica.
Claves para la selección
La elección de este tipo de fórmulas está en nuestras manos, por ello descubrimos las 10 claves para seleccionar la mejor opción, tal y como aconseja Victoria Sánchez a EFE Estilo:
1. Hay dos tipos de cosmética, tradicional y ecológica, un conocimiento imprescindible para buscar una alternativa.
2. Hay que desconfiar de lo que pone en la etiqueta. “La etiqueta de 100 % natural no implica que el producto sea ecológico. Son frases fáciles que confunden al consumidor”, dice.
La legislación en cosmética no está regulada, y cualquier empresa puede utilizar esa terminología sin serlo: “Queda mucho por llegar a la legislación en alimentación”.
3. Buscar un sello BioVidaSana, Organic Association o BDIH es el mejor indicio para saber que podemos elegir ese producto.
4. Es imprescindible comprobar la lista de ingredientes. “Si la etiqueta promete una alta concentración de orquídea, y ésta va en última posición, por ejemplo, es que no contiene todas sus propiedades”, indica Sánchez.
5. Podemos identificar de manera muy sencilla los grupos de ingredientes prohibidos en cosmética econatural.
Así, por ejemplo, el aluminio (aparecen en los desodorantes); los parabenes, hay siete autorizados, pero cinco de ellos estarán prohibidos a partir del 2016; todos los disruptores endocrinos alteran el sistema endocrino; también están prohibidas las parafinas y los petrolatum.
Y los sodium favorecen la espuma en los geles: “no son peligrosos, pero son sulfoactivos y eliminan la capa de protección de la piel”, dice Sánchez,
6. En cosmética ecológica hay que buscar un asterisco que indica que sus componentes provienen de la producción ecológica.
7. Si no lleva asteriscos, podemos estar ante un producto natural, pero no ecológico.
8. La etiqueta debe indicar el porcentaje de los ingredientes ecológicos que contiene.
9. Está prohibido testar los productos ecológicos en animales, tanto lo que se refiere a las materias primas como al producto final.
10. Las personas con problemas de piel son las primeras que deberían acercarse a la cosmética natural, ya que está libre de hormonas y elementos transgénicos que pueden agravar ese problema.