Nueva York, 26 jul (EFE).- El español de 112 años Salustiano Sánchez Blázquez, un músico salmantino que se instaló en el estado de Nueva York hace más de ochenta años, se ha convertido en el hombre más anciano del mundo, según se puede ver hoy en la página web del Guiness World Records.
Sánchez sucede así al japonés Jiroemon Kimura, el que fue considerado el hombre más viejo del planeta hasta que falleció a los 116 años el pasado mes de junio, señaló la web.
Tras su muerte, la organización revisó informes del censo, documentos de inmigración y registros de matrimonio, y determinó que el español es el único varón vivo nacido en 1901 y que tiene su certificado de nacimiento.
Nacido el 8 de junio de 1901 en El Tejado de Béjar, un pueblo de Salamanca, Sánchez siempre ha sentido una pasión especial por la dulzaina, un instrumento de viento parecido a la chirimía que toca desde bien pequeño y con la que se ganó algunas monedas en las fiestas del pueblo y algunas bodas, explica Guiness.
Aunque asistió a la escuela hasta los diez años y se considera «autodidacta», en sus 112 años de vida ha viajado por varios países por motivos de trabajo, aunque fue el amor lo que le hizo instalarse finalmente en Nueva York.
La humildad que le caracteriza según sus familiares le lleva a afirmar que no siente que haya logrado nada especial al convertirse en el hombre más anciano vivo en la Tierra.
El hombre más viejo del mundo asegura que el secreto de esta longevidad es comer un plátano al día y su dosis diaria de los analgésicos Anacin para tratar los dolores que padece, según un comunicado de Guiness World Records.
La aventura personal del salmantino empezó a los diecisiete años, cuando se trasladó a Cuba junto a su hermano mayor y un pequeño grupo de amigos para trabajar en los campos de azúcar y, dos años después, se marchó a Estados Unidos a trabajar en las minas de carbón de la ciudad Lynch, en el estado de Kentucky.
Finalmente, se instaló en la zona de las cataratas del Niágara en el estado de Nueva York, donde reside en la actualidad y donde en 1934 se casó con el amor de su vida, Pearl.
Fruto de este matrimonio, el español tuvo tres hijos, siete nietos, quince bisnietos y cinco tataranietos.
En los últimos años y pese a su entrada edad, Sánchez se mantiene muy activo y entre sus pasatiempos preferidos se encuentra la jardinería, los crucigramas y los juegos de cartas con los amigos.
Actualmente, la japonesa Misao Okawa, de 115 años, es considerada como la mujer más anciana del mundo, aunque según el Guiness World Records, la persona que más años vivió en el planeta fue Jeanne Louise Calmet, que murió en el sur de Francia en 1997 a los 122 años. EFE