- abril 23, 2013
La ciudad de Sao Paulo tiene una numerosa población italiana y está orgullosa de sus restaurantes italianos. Así que fue una sorpresa cuando algunos de ellos anunciaron que retirarían de sus menús los platos que llevan tomate.
Este inesperado cambio se produjo debido al incremento del precio de los tomates en Brasil en los últimos 12 meses, que un momento llegó al 150%, según estadísticas oficiales.
El impacto de este aumento en los precios no sólo se dejó sentir en los restaurantes, sino también en las cocinas de los ciudadanos, lo que incrementó la presión sobre las autoridades para que frenaran la inflación galopante, un asunto sensible en el mayor país de Sudamérica.
Nadie cree que se esté produciendo un regreso a los malos tiempos de la hiperinflación de la década de los años 90, que llegó al 2.000%.
Pero el pasado fin de semana, el aumento de los precios ocupaba la portada de algunas de las revistas más destacadas de Brasil. En uno de ellas aparecía el pie de la presidenta Dilma Rousseff aplastando… un tomate.
Inflación
Contener la inflación es uno de los desafíos de la presidenta Dilma Rousseff.
Los alimentos son uno de los rubros en los que los brasileños están sintiendo más el aumento de los precios, lo que se ha convertido en un asunto políticamente sensible.
Se han conocido casos de contrabando de tomates desde países vecinos, como Argentina y Paraguay, donde cuestan menos.
Pero, a parte de los factores estacionales, los expertos creen el aumento de los precios de los tomates demuestran que el índice de inflación de Brasil va hacia arriba. En marzo, la tasa interanual se situó en el 6,59%. Aunque más baja que en otros países emergentes, sigue por encima del objetivo del gobierno del 4,5%.
Actualmente, la tasa de interés está en 7,25%. Hace una década se encontraba entre las más altas del mundo: alcanzó el 23,5% en 2003.
Burla
Muchos brasileños han respondido con humor al aumento del precio de los tomates. Han surgido numerosas páginas de Facebook que les permiten a los ciudadanos decir lo que piensan sobre el que se ha convertido en un producto de lujo.
En una página llamada «Tomate caro» hay fotomontajes y viñetas que se burlan del fruto de la tomatera. Aquí el link
http://www.facebook.com/TomateCaro?fref=ts
Fuente: www.bbc.co.uk