- abril 8, 2015
Sally Caballero se colocó uno de los 15 delantales del famoso reality show gastronómico de España. La compatriota es una de las aspirantes que lucharán por la victoria en el popular programa de televisión.
El emocionante momento que vive Sally Stefanih es de no creer, pero su talento, perseverancia y amor por la cocina la llevaron a formar parte de los 15 concursantes elegidos de entre 15.000 candidatos para el conocido reality MasterChef de España.
EL premio final es de 100.000 euros, su propio libro de cocina y un Máster en Cocina, Técnica y Producto en el Basque Culinary Center, la Universidad de Ciencias Gastronómicas más prestigiosa de España.
El reality reunió a personas de todas las edades y con profesiones distintas. Cada una de las historias son muy emotivas, y la de nuestra compatriota aún más por las situaciones que le tocó vivir durante su infancia.
«Mi madre es cocinera pero nunca me ha enseñado ella, porque no hemos convivido juntas ya que me han criado mis tíos», así comentaba Sally Caballero durante su presentación ante los jueces en el reality.
Abandonada por su madre y adoptada por unos familiares, que nunca la acogieron en la familia, a los 14 años terminó en las calles. Trabajando en el servicio doméstico, fue cuando encontró el cariño de su jefa que se ocupó de ella. Le dio estudios y le inculcó un amor por la cocina. A la muerte de su jefa, Sally emigra a España y recala en Ciudad Real. “Ahora tengo un trabajo estable, un marido al que adora y una hija que se ha convertido en el centro de su vida”, ha relatado a las cámaras de MasterChef.
Siempre ha estado presente su pasión por la cocina, que la sacó de las calles y que enamoró a su pareja la primera vez que probó uno de sus platos. Ahora pretende que la cocina sea su medio de vida tras MasterChef.