- enero 30, 2014
Keanu Reeves, en la boda de su mejor amigo. La ceremonia civil se celebrará este jueves en una bodega del departamento de Canelones, colindante con Montevideo,
Famoso por sus papeles de héroe de acción en «Matrix» (1999) o «Speed» (1994), el actor de 49 años Keanu Reeves considera que «The Devil’s Advocate» («Pactar con el diablo», 1997) fue su mejor papel frente a las cámaras, según una entrevista concedida al diario uruguayo El Observador publicada hoy.
Reeves, nacido en el Líbano pero criado en Canadá y que tiene también las nacionalidades estadounidense e inglesa, se encuentra estos días en Uruguay para asistir a la boda de su amigo Carl Rinsch, el director de su última película, «47 Ronin», con la modelo uruguaya Gabriela Rosés Bentancor.
La ceremonia civil se celebrará este jueves en una bodega del departamento de Canelones, colindante con Montevideo, aunque el actor ha aprovechado su presencia en el país para viajar al balneario de Punta del Este, a unos 140 kilómetros al este de Montevideo.
Además, en los últimos días el intérprete ha sido visto en varias ocasiones paseando por el selecto barrio montevideano de Carrasco, donde se encuentra el hotel en el que se aloja, y accediendo a tomarse fotos con algunos transeúntes.
En la entrevista exclusiva con El Observador, Reeves reconoce que antes de llegar a Montevideo, Uruguay «era un país desconocido» para él y, al ser cuestionado por la figura del presidente uruguayo, José Mujica, pregunta inicialmente «¿Qué es Mujica?».
Tras la aclaración del entrevistador, afirma luego que conoce el inédito plan uruguayo de regular la producción y venta de marihuana, impulsado por Mujica y que ha dado la vuelta al mundo.
Dice que «suena muy progresista» y que es «ese tipo de cosas que tendrían que estar sucediendo».
Reeves admite a El Observador que le cuesta compaginar la fama con su vida personal con la frase «no es cómodo que te filmen mientras estás almorzando».
«No salgo mucho y soy una persona muy privada», añade el actor, que se define, usando la tercera persona, como alguien «muy bueno», que «tiene un gran sentido del humor, es inteligente, tiene una curiosidad maravillosa sobre el mundo, le gustan las motocicletas, ama actuar y dirigir y quiere contar historias».
A punto de llegar al medio siglo de edad, dice estar «muy agradecido» con la vida por seguir su «pasión», el cine, al tiempo que confiesa que a veces es un poco «extremista», porque deja que el trabajo eclipse el resto de sus actividades o viceversa.
Sobre su carrera frente a las cámaras, en la que destacan títulos como «Little Buddha» («El pequeño Budha», 1993) o «My Own Private Idaho» («Mi Idaho privado», 1991), coloca por encima del resto de papeles el de «The Devil’s Advocate» («Pactar con el diablo», 1997), cinta en la que comparta cartel con Al Pacino y Charlize Theron.
Reeves subraya la satisfacción que le reportó dirigir recientemente «Man of Thai Chi», una película de kung-fu en la que también interviene.
Asegura que su deseo ahora es ponerse detrás de las cámaras para rodar una serie de televisión llamada «Arcadia», porque le gustan «las distintas maneras» en las que «se puede contar una historia» en ese medio. EFE