- octubre 14, 2013
En un ambiente laboral todo importa, desde lo que hacemos, decimos y hasta la forma de comportarnos, especialmente con tu jefe. Tampoco queda en segundo plano, el respeto a tus compañeros y a la empresa a la que perteneces temporalmente. Te dejamos la lista de algunas cosas que nunca tenés que decir, llevá a la práctica y disfruta del resultado.
-«No es justo»: Es una frase que no se lleva de la mano con el profesionalismo y la responsabilidad. Si vas a hacer algo no protéstes ni lleves en cuenta quién ya lo hizo y quién no.
-«No es mi problema»: Todo lo que tenga que ver con la empresa es de tu incumbencia. Lo peor que podes decir es ‘no es mi problema’ estas sumando puntos en tu contra.
-«No me pagan lo suficiente»: Si no estás de acuerdo con el salario que percibes lo correcto es hablar en recursos humanos. No ir diciendo en los pasillos del trabajo.
-«Sin problemas»: Cuando quieres decir: «De nada».
– «Lo intentaré»: lo apropiado es decir: «Lo haré».
– «Odio a esta empresa»: Si bien es cierto nadie puede obligarte a estar en una empresa que no te agrada. Si te está pasando y si en verdad odias, no lo digas, actúa y renuncia.
– «Pero si siempre lo hemos hecho así…» ¿Qué tal si innovas?: Debe ser ¿Qué tal si innovamos? Haceté parte de la familia de la empresa.
– «Es imposible, no hay nada que hacer»: Pensá dos veces y volvé a pensarlo ¿Estás realmente seguro? Qué ya no hay nada que hacer. En todo caso pedí ayuda. No dejes que tu jefe encuentre la solución sin que vos lo hayas intentado.
– «Chicos…»: Esta frase, no es la más apropiada, mejor dejarlo para otro ambiente.
– «¿Sí, vos crees?»: Suena a discusión, entonces mejor no uses.
– «Lo siento, no tengo tiempo para esto»: Si esto le decís a tu jefe, estas firmando tu carta de despido.
También ten cuidado con frases como estas: -«Creo que…», «Podrías» o «Deberías…», «Es una tontería lo que voy a decir…»
Fuente: www.forbesmagazine.es