Hoy quiero dejarte más que tips, o sugerencias, un poquito de la experiencia vivida durante este tiempo donde le vengo proponiendo un poquito más de amor hacia ustedes mismas.
Foto ilustrativa: Instagram
Porque creo firmemente que una Autoestima bien ejercitada es la llave que abre puertas en la vida, para complicarnos menos con las ropas, y brillar más.
Y Autoestima para mí, está directamente relacionada la Auto Aceptación.
Es esencial entender que no somos perfectas, que buscar la perfección es entrar a un laberinto que paraliza nuestras vidas, y que al fin y al cabo estamos aquí para hacer lo mejor que podemos con los recursos que tenemos hoy, aceptando que somos todas humanas, y correr detrás de lo que nos falta en vez de mirar lo que tenemos solamente nos quita la energía para SER felices.
Un cuerpo perfecto es el que se alimenta bien, se ejercita y descansa.
La familia perfecta es la que pasa dificultades, pero con resiliencia sale adelante.
El trabajo ideal es el que nos deja dinerito pero no sin sentirnos plenas y que estamos dejando algo bueno para el mundo.
Y saber, que existen días grises, pero que todo lo malo tiene su lado bueno, aprender a comprender, perdonar, y tolerar nos lleva al camino del auto amor, porque cuando nos afloran sentimientos positivos, también podemos dar lo mejor que tenemos a los que nos rodean, y nace ese brillo especial, que nos hace ser bellas, sin necesidad de necesitar al consumismo.
Si bien es cierto, todos sentimos también en algunos momentos rabia, frustración, miedo, envidia, vamos a administrar mejor nuestros sentimientos si dejamos de querer crear la imagen de la familia perfecta, el cuerpo y la vida perfecta, sino aceptando quiénes somos y la vida que llevamos (con las partes buenas y malas) podrá ser posible lidiar mejor con cualquier frustración.
Y de esa manera también, podríamos administrar mejor nuestra voluntad, tengamos mayor fuerza emocional interna, y no necesitemos comprar tanto.
Aceptarnos tal cual somos, fortalecer nuestro SER, irradia una emoción tan grande, que la belleza exterior solamente, pasaría a segundo plano.