- marzo 22, 2014
Con trece años de carrera y seis discos en su haber, el cantante español Alex Ubago llega a Quito «agradecido con la vida» y feliz de seguir haciendo canciones y de continuar subiéndose a los escenarios para compartir con sus seguidores las emociones que destilan las letras de sus temas.
En la capital ecuatoriana, donde actuará por primera vez, cerrará una gira suramericana que le ha llevado por Argentina, Uruguay y Paraguay y que dará paso, tras unos días en España, a nuevos conciertos en México.
En medio de una maratoniana sesión de entrevistas, el cantante aprovecha una pausa para sentarse al piano unos instantes y tocar algunos compases, aunque confiesa que no domina ese instrumento y aún no se atreve a tocarlo ante el público, pero pronto lo hará.
«Estoy practicando un poco y algún día lo haré, pero de momento me quedo con la guitarra», comenta en una entrevista con Efe.
Ubago dice que está agradecido con lo que la vida le ha dado. «Una familia preciosa, mi mujer, mi hijo, mis padres, amigos, buenos amigos y, luego, tengo la gran suerte de poder dedicarme a lo que me gusta: a hacer canciones, viajar y conectar con un montón de gente a través de esas canciones. Y eso me hace muy feliz», explica.
Esa estabilidad se refleja en sus canciones, que califica de «bastante autobiográficas» y para las que se inspira en su entorno más cercano, sus seres queridos y en sus «alegrías, penas, amores, desamores…».
«Mentiras sinceras», su último trabajo, es un disco «muy dedicado al amor», a diferencia de trabajos anteriores en los que había una mayor carga de temas sociales, y habla mucho de las relaciones humanas, con temas dedicados a su esposa y a su hijo, explica el artista.
Esas mentiras son una metáfora para decir que «en esta vida no siempre todo es lo que parece, o que a veces las cosas tienen más de una manera de ser vistas», señala el compositor vasco, quien reconoce la contradicción que encierra el título, colofón de la letra de un tema «que juega mucho con la contradicción».
Con una escenografía sencilla y una banda de músicos argentinos con la que ya lleva cerca de 50 conciertos, el compositor desgranará los temas de ese disco y de toda su trayectoria que, después de estos años, le ha permitido tener «un repertorio completo».
Por eso la mayoría de las canciones que ofrecerá son sencillos extraídos de sus diferentes trabajos, lo que favorecerá la participación de la gente, opina.
Ubago asegura que llega a Quito con mucha ilusión ante las peticiones de actuar en el país andino que le habían hecho muchos ecuatorianos con los que ha trabado relación a través de las redes sociales.
Y es que el artista está complacido con «la relación tan directa» que se puede tener con los admiradores gracias a Facebook o Twitter y destaca que ello permite reducir la distancia entre el seguidor y el intérprete.
En su opinión, las redes sociales son instrumentos ya imprescindibles para los músicos, a quienes ayudan a conocer los gustos de sus admiradores sobre sus canciones y, además, a mostrarles un lado de la vida personal que de otro modo, tal vez no podrían conocer.
Internet ha influido definitivamente también en el terreno de la música, considera Ubago, quien recuerda muchas experiencias hermosas, como el emotivo mensaje que le hizo llegar una de sus seguidoras.
«Me contaba que había estado muy enferma en el hospital y decía que mis canciones le habían ayudado a seguir adelante. Y la verdad es que es muy bonito leer este tipo de cosas. Solo por eso, merece la pena hacer lo que hacemos», afirma. EFE