- octubre 31, 2014
Una joven camina durante diez horas por Nueva York; más de cien hombres la increpan por la calle.
Un vídeo destaca en Youtube con más de catorce millones de visualizaciones. No se trata de un gato tocando la guitarra ni de otras excentricidades del canal de vídeo que suelen “viralizarse” de inmediato, sino de la última campaña de la plataforma Hollaback!, encaminada a denunciar el acoso callejero.
Más de cien hombres increparon a una mujer con todo tipo de supuestos “halagos” durante las diez horas de grabación que duró el experimento, aunque sus responsables lo han resumido en dos minutos.
“10 horas caminando en Nueva York siendo mujer” ha desatado polémica y artículos en diversos medios de comunicación que denuncian el machismo latente en las calles.
Con un “look” muy normal -vaqueros negros y camiseta del mismo color-, Shoshana B. Roberts, la voluntaria protagonista del clip, escucha frases como “¿Qué pasa contigo chica? Alguien te acaba de decir que eres guapa, deberías dar las gracias”.
Algunos, incluso se atreven a caminar varios minutos al lado de la joven, lo que incrementa aún más la sensación de agobio y acoso que pretende transmitir -y que transmite- este vídeo ya “viral“.
Las miradas e insinuaciones “forman parte del día a día de cualquier mujer en cualquier lugar del mundo”, dice a Efe Estilo la artista visual Yolanda Domínguez, especializada en este tipo de temáticas.
“También están los tocamientos, de los que no habla el vídeo; yo misma he sido tocada por mis jefes en la oficina, por manos anónimas en la discoteca e incluso andando por Madrid“, confiesa Domínguez.
“Un montón de tíos dicen cosas como, ‘oh, venga, si es solo un cumplido’. Quería que la gente comprendiese lo que se siente al escuchar esto una y otra vez, y que luego pensaran en extrapolarlo a toda una vida así”, ha explicado al portal Think Progress el creativo Rob Bliss, responsable de grabar este vídeo protesta.
La web Hollaback! denuncia el acoso callejero en diversos puntos de Estados Unidos, y para ello anima a las mujeres a subir fotografías o vídeos que muestren situaciones de este tipo.
En España, la artista Alicia Murillo llevó a cabo algo parecido con su proyecto “El cazador cazado“. La feminista subía vídeos a Youtube en los que se denunciaban actos de “acoso machista callejero”, aunque muchos se retiraron a petición de algunos foros.
El piropeo, escribe Murillo en una revista con la que colabora habitualmente, Píkara, “constituye una forma cotidiana de agresión sexista”.
Para Yolanda Domínguez hay unos responsables claros: “los medios de comunicación y la publicidad”, que presentan una imagen de la mujer cercana a la de “objeto sexual“. “Estas imágenes nos indican tanto a hombres como a mujeres cómo nos tenemos que comportar, ¿qué otra cosa cabe esperar?”, lamenta la artista. EFE.