Han transcurridos los años y la figura exuberante seguida por millones de personas a lo largo y ancho del planeta aún sigue siendo recordada y admirada.
“La figura de Marilyn Monroe fue mitificada hasta tal punto que aún se la considera una de las mujeres más deseadas del mundo”, dice el portal Abc de España.
La actriz estadounidense, Norma Jeane Mortenson, nombre real de la actriz, es uno de los ídolos sexuales que todavía se recuerdan con mayor frecuencia. A pesar de su radiante sonrisa y escultural figura, Monrroe escondía un alma frágil con un pasado triste.
“Los focos, las cámaras y el favorecedor maquillaje no conseguían traspasar la cuidada piel de Marilyn Monroe, tras la que se ocultaba una infancia de lo más dura”, explica el portal.
La rubia más famosa del cine vivió una niñez traumática, creció sin una figura paterna que le produjo problemas de personalidad que se agravaron cuando su madre fue internada en un psiquiátrico tras padecer una crisis nerviosa. Con esta situación se traslado a varios orfanatos donde llego a trabajar como ayudante de cocina.
Con tan sólo 16 años se casó con un policía, cinco años mayor que ella, que se marchó a Australia cuando comenzó la Segunda Guerra Mundial. Esta situación propició que Marilyn tuviera que buscarse la vida y comenzara a trabajar en una fábrica de municiones.
La Radio Plane de Burbank cambiaría su vida para siempre. “Mientras discurría una de sus jornadas de trabajo en la planta, un fotógrafo del Ejército la inmortalizó con su objetivo y estampó la imagen en una revista militar”, asegura Abc.
Su éxito llegó poco después, ya divorciada de James Dougherty, el primero de los tres maridos que tendría hasta su muerte en 1962, cuando la 20th Century Fox le ofreció su primer contrato. Una de las cláusulas estaba el requisito de adoptar el nombre artístico de Marilyn Monroe.