Según la justicia, Sonia Vera quiso terminar con la relación y fue el motivo por lo que Adolfo Trotte planeó su asesinato. En julio del 2011, se encontró el cadáver de Sonia en un buss en la Villa Olimpia. Lo había asesinado su esposo. Días después, el hombre fue arrestado en Argentina donde se había fugado. Adolfo Trotte confesó entonces que mató a su mujer y quiso justificarlo alegando infidelidad.
Christian Trotte, hermano de Adolfo y cuñado de Sonia dijo entonces a la prensa que no justificaba a su hermano pero que este “hizo lo que cualquier hombre hubiera hecho en su lugar”.
Pablina Lugo, madre de Sonia Vera, había señalado a un medio de prensa local que su hija había sido violada y drogada por el custodio de Trotte. Desmintió esa información al señalar que ese custodio, en realidad, era el amante de la mujer.
Hoy, a casi dos años después del asesinato de Sonia en manos de su esposo, el juzgado dio una sentencia de 30 años de prisión más 10 años por peligrosidad. Las autoridades expresaron que dieron la medida de seguridad a Trotte porque lo describen como una persona con problemas de adaptación social e irritable, de acuerdo al estudio psicológico realizado al imputado.
Según los peritos psicológicos, Adolfo reacciona por estímulos, tiene predisposición de reaccionar de manera exagerada y tiene el ego elevado. Además, cumple una serie de rasgos que apeligran a sus allegados más cercanos.
La pena de 30 años fue deliberada de manera unánime, sin embargo las medidas de seguridad, fueron designadas por votos divididos, según explicó la jueza Dina Marchuck.
Tras escuchar el fallo del juzgado, la madre de Sonia Vera expresó «se hizo justicia, ahora mi hija descansa en paz , pero ahora tengo miedo de que se cumpla la amenaza de Trotte». Instó además a que las mujeres no lleguen al estadio que llegó su hija: «a todas las tengan miedo para que no les pase lo que le pasó a Sonia»
Fuente: Ultima Hora, Paraguay.com